Barvielha lleva una vida ideal, trabajando como camarera en Happy Bar, un local donde todo es perfecto, con fiestas llenas de música y color, y donde cada día son el mejor día. Pero Barvielha se hace algunas preguntas y cuestiones bastante incómodas sobre la seguridad y la salud laboral de ese lugar que no encajan con el mundo idílico en el que vive. Cuando Barvielha se dé cuenta de que es capaz de cumplir las normas en PRL, y trabajar en un entorno seguro desde la perspectiva de género, decidirá calzarse unos zapatos sin tacones y viajar hasta el mundo real.